Entre los propósitos de años nuevos más usuales se encuentran plantar un árbol, leer más libros, bajar de peso, y, ¡bingo!, acabar con todas tus deudas. Aprovechamos que hoy es un día de cementerios, el más allá y honores para que puedas despedirte, por fin, de tantas deudas.
Según el Inegi, el 56.9% de los hogares mexicanos tiene una deuda. Estas pueden ser hipotecarias, de tarjeta de crédito, créditos de nómina, y préstamos. ¿Consideras que eres parte de más de la mitad de la población que está endeudada?
En la misma encuesta del Inegi, la Encuesta Nacional sobre las Finanzas de los Hogares 2019, se detectó que del total de la población:
- El 54.5% tiene una vivienda principal
- 1% tiene una propiedad no principal
- 9% tiene negocios
- 8% tiene vehículos
- 5% tiene una cuenta de ahorro para el retiro
- 6% tiene un ahorro para el retiro informal
- 6% un ahorro para el retiro formal
Es decir que son muchos más los mexicanos que tienen deudas contra los que están ahorrando para su futuro.
El porcentaje de deuda más alto es por razones hipotecarias (55.4%) y le siguen las tarjetas de crédito (11.5%). A pesar de que un 15.4% dijo tener deudas de otro tipo.
¿Cómo acabar con tus deudas?
Primero lo primero: debemos entender que las deudas no pueden irse en un parpadeo. Así como nos llevó un tiempo hacernos de ellas, nos tomará otro rato liquidarlas.
Ponerlas en un altar de muertos requiere mucha disciplina, que ya tienes, y planificación, que pronto tendrás.
Sigue estos consejos para irte despidiendo de ellas:
- Entiende el origen de tus deudas
¿Sabes desde hace cuanto debes esa ropa que ya no te queda? Es vital que rastrees cómo se originó tu deuda para que se repita lo menos posible y para que caigas en cuenta de que existen maneras para evitar deudas futuras.
Pregúntate si obtuviste esta deuda por un aspecto sentimental (¿compraste algo por sentirte mejor?), si fue por impresionar a alguien, si fue por arrebatado.
Hay deudas buenas y deudas malas. Evalúa cuál de estas tienes más y proponte pensártela más de diez veces antes de endeudarte.
- Fracciona tu deuda
Dicen por ahí que es más fácil pagar en abonos que en un solo movimiento. Aparte de que mentalmente sentimos que es más sencillo, si fraccionamos el pago tenemos liquidez para otros gastos. Decide cómo hacerlo de manera que sea cómoda y no te genere más deudas.
- Sacrifica
Para pagar nuestras deudas tenemos que aceptar la incomodidad. Serán meses o años de cambiar nuestro estilo de vida. No se puede pagar alguna deuda sin sacrificios. Decide qué vas a sacrificar que te reste menos en tu día a día. Pueden ser viajes a lo largo del año, alguna que otro lujo o estrenar un vehículo.
- Consigue un aliado
Pídele a alguien que te exija que pagues. Esta persona puede tratarse de un familiar o amigo. Haz un pacto con él o ella para que te comprometas a hacer los pagos debidos. Pongan fechas, ¡y paga!
¿Qué te parece? ¿Esto será un buen inicio para poner tu próximo altar de muertos? Cuéntanos qué otra estrategia has usado para liquidar tus deudas.
Y si necesitas la ayuda de un asesor empresario en seguros, un experto en el ahorro y la protección, CONTÁCTANOS :)