Muchos murieron esperando ver a su equipo favorito de futbol coronarse como campeón. Muchos perdieron la esperanza de ver otra estrella en el escudo del equipo de Guadalajara, Jalisco.
El domingo 12 de diciembre por la noche, Atlas se enfrentó al León en su casa, en el estadio Jalisco. Después de un cansado partido y de un tiempo extra que parecía no terminar, se fueron a penales. Tiro tras tiro, el estadio entero guardó la respiración para ver el resultado.
Cuando el delantero del Atlas, Julio César Furch, metió el último penal la leyenda cobró vida. Luego de 70 años los zorros ganaron 4 a 3 en los penales, 1 a 0 en el marcador final.
Con velocidad la ciudad se llenó de pitidos, vítores y gritos. Una de las glorietas más importantes de la ciudad, la de las y los Desaparecidos o también llamada la de los Niños Héroes, se convirtieron en escenarios protagonistas del festejo de la afición.
El resultado de este último enfrentamiento en la cancha es la suma de esfuerzo, disciplina y pasión. Del éxito rojinegro obtenemos importantes lecciones.
Disciplina
En la cancha vimos a un equipo bien articulado, con un excelente equilibrio de defensa y ofensiva. Esto es reflejo de la disciplina en los entrenamientos y del enfoque para alcanzar una meta en común.
Trabajo en equipo
En un equipo de futbol, si no hay trabajo en equipo, no hay deporte. Cuando el Atlas se fue a penales, cuando estuvo en tiempo extra, cuando anotó un gol, no fue el resultado de una sola persona (ni del portero Camilo Vargas ni del delantero Furch) sino de todo el equipo y su concentración.
Pasión
Eran 70 años sin ganar. Era estar cerca del primer lugar. No se les podía ir. Tenían que ganar por fin. Sin lugar a duda, las gradas y la fuerza de la Fiel imprimieron en el equipo la confianza y propósito suficiente para ganar.
Entusiasmo
Es lo que se vivió en cada porra, grito, vitoreo, y apoyo de la afición. Solo el entusiasmo y la pasión mantuvieron una porra bien nutrida y esperanzada en la capacidad de su equipo predilecto.
Todas estas características le permitieron al equipo obtener la copa y ver su nombre escrito en ella. No cabe duda de que cada equipo entrega lo mejor de sí en la cancha. La competencia es difícil y se necesitan combinar diferentes factores para llegar al primer lugar. En diciembre de 2021 Atlas acabó con su maldición y les regresó la esperanza a millones.
Las lecciones aprendidas son muy valiosas para nosotros como Certeza Aseguradora, porque podemos relacionarlas con mucha facilidad con la profesión de Asesor Empresario en seguros.
En esta carrera es muy común escuchar negativas y excusas, por eso se necesita disciplina para enfocarse en los resultados positivos, así como en las actividades diarias productivas.
Se necesita trabajo en equipo para agilizar la serie de procesos necesaria para que un cliente obtenga el producto y servicio que necesita.
La pasión es imprescindible porque solo así nos esforzamos por proteger a más y más familias mexicanas.
Por último, sin entusiasmo los asesores se rinden rápido y se marchan de esta gigantesca oportunidad.
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