Te habíamos prometido un artículo sobre la ansiedad laboral. Este tema nos parece súper importante, sobre todo ahora que llevamos más de un año y medio con la situación pandémica. Está crisis sanitaria ha cambiado nuestras maneras de socializar, de encontrarnos con nuestros seres queridos, de estudiar, de trabajar, hasta de comer y de comprar.
Cada persona ha buscado la manera de adaptarse y siempre se agradece un poco más de ayuda, así que te preparamos 5 técnicas para reducir tu estrés y ansiedad:
Cómo controlar tu ansiedad laboral
- Ejercicio
Tal vez creas que esta técnica ya está muy repetida... Pero la realidad es ¡que es clave! Tu cuerpo, tu intelecto y tu corazón conforman tu salud y este es uno de los activos imprescindibles para lograr cualquier tarea, grande o pequeña.
El expresidente de Estados Unidos, John F. Kennedy, afirmaba que la salud física es el fundamento de la actividad intelectual creativa y dinámica; y es muy cierto. Cuando nos ejercitamos liberamos neurotransmisores relacionados a la felicidad y el bienestar, aparte de que mejoramos los procesos dentro de nuestro cuerpo.
Toma tu agenda, identifica en qué momento puedes ejercitarte e intenta hacerlo por lo menos 3 veces a la semana.
- Desensibilización
Esta técnica es sencilla, pero requiere de práctica. Por pasos esto es lo que tienes que hacer:
1) Primero aprender a identificar tu ansiedad o tu estrés, ¿qué haces cuando estás en esta situación? ¿te duele alguna parte específica del cuerpo? ¿se genera algún sentimiento? ¿piensas en algo recurrente?
2) Una vez que lo hayas identificado, lo que tienes que hacer es comenzar a respirar cuando la situación se presente. La respiración tiene que ser profunda, controlada y consciente.
3) El siguiente paso es pensar en qué es lo que te está haciendo sentir ansioso. La mayoría de las veces va a tratarse de más de un evento o factor. Lo que tienes que hacer ahora es escribirlos en una lista, ya sea física o mental, y acomodarlos según el estrés que te generan.
4) Después piensa cuáles de estos están enteramente en tus manos y resuelve el más prioritario. Si no lo puede resolver, busca ayuda o comprende que no es tu responsabilidad.
No es fácil. Quizás en un inicio no te funcione al 100%, pero con la práctica esta desensibilización provoca que entiendas en qué aspectos de tu trabajo sí puedes intervenir y en cuáles otros solo puedes observar.
- Meditación
La meditación tiene también que ver con la relajación y la respiración, como la técnica anterior. Sin embargo, en la pasada nos enfocamos en detectar que sí y qué no se puede hacer. En cambio, con la meditación vas a aprender a dejar tu mente en blanco por unos momentos. Esto no significa no pensar en nada, sino no intervenir en el tren de pensamiento de tu cabeza.
Aquí te dejamos una meditación guiada sencillísima. Busca a lo largo de tu día generar los espacios, ya sea de 5, 10, 15 o 20 minutos para meditar.
Notarás el cambio. Te sentirás más tranquilo.
- Red de apoyo
¿Tienes algún colega que también sea tu amigo? Conviértelo en la persona con la que puedas abrirte y hablar de tu ansiedad. Este colega será tu partidario contra el estrés.
Detecta con qué personas puedes platicar sobre lo que te está conflictuando y que te dé su opinión objetiva.
Aprovecha el departamento de salud psicosocial de tu empresa o busca a un profesional si crees que necesitas mucho más apoyo.
Acostúmbrate a platicar con tus seres queridos y tus amigos. El objetivo de la red de apoyo es que exteriorices lo que te preocupa para que tú también puedas medirlo de una manera más crítica y que, al compartirlo, te sientas liberado.
- Rutina y autocontrol
Una de las razones por las que nos sentimos más ansiosos es porque no tenemos la disciplina para organizar nuestro día y acomodar las actividades que tenemos que desarrollar durante la jornada. Para reducir la ansiedad es necesario obtener certeza. Diseña tu día con antelación; ten disciplina y autocontrol para cumplir con lo que te propusiste. Recuerda: tienen que ser metas que se puedan medir, que se puedan agendar y que se puedan lograr. No intentes comerte al mundo de un bocado.
Por último... ¡tómate tus tiempos para reír, ver memes, escuchar música que te guste y divertirte!
El trabajo no debe ser una carga abrumadora, sino una forma de sacar lo mejor de ti.
Sobre todo, durante pandemia han sido las madres que trabajan una de las poblaciones que más resistieron la ansiedad. Tuvieron que convertirse en maestras, continuar con su trabajo, y apoyar a sus enfermos. De manera cultural, todos estos roles los ha cargado la mujer.
Por eso queremos presentarte esta profesión para mujeres disruptivas, mujeres con mucha motivación, y también mujeres que valoran su tiempo libre y de calidad para ellas mismas, su familia y sus seres queridos.
Te regalamos el siguiente ebook para que conozcas está profesión y sus bondades.
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